Fuente: PROEXCA

Los hoteles, las playas y hasta el sol está vacío porque nadie toma su vitamina. Han tomado sus primeras vacaciones para que nos reencontremos con la brisa y la arena renovados. Una reapertura que se dará progresivamente a medida que confinemos al virus. Y nuestras islas tienen las mejores condiciones para lograrlo. “Quienes antes lo consigan y lo aseguren serán los que se situarán en una posición privilegiada en la recuperación de la actividad”, señala Cristina del Río Fresen, experta en turismo.