Fuente: Heraldo

Como primer ministro de Bélgica, el liberal Charles Michel, ya apuntaba maneras en esto de conseguir acuerdos por agotamiento. Esa persistencia sumada al momento crítico por una pandemia que sigue aquí, y al miedo a fracasar -otorgando al mundo la imagen de un proyecto europeo disfuncional-, permitían este lunes al presidente del Consejo Europeo dar con la clave para salvar la cara. Una propuesta (que se veía inminente ya desde el sábado) y que parece que va a permitir al final romper el bloqueo al que los cinco países 'frugales' habían condenado la negociación del fondo de recuperación. Perdida la cuenta de horas de discusiones, de bilaterales y confesionarios, los Veintisiete se sentaban juntos a última hora de la noche con un talante distinto; vislumbrando la salida al túnel y con el ala dura ya más controlada.